Más de dos horas permanecieron cerradas al tráfico vehicular y peatones las calles Allende, Guerrero y Carranza, luego de que se evacuara el personal del Palacio de Justicia Laboral por amenaza de bomba, artefacto que no se encontró y regresaron a sus actividades cotidianas.
Ejército, Fuerzas Estatales, Policía Federal, Municipal, Vialidad y Bomberos se concentraron frente y en el perímetro del edificio público. Elementos especiales revisaron el interior por todas las oficinas y pasillos, pero no encontraron ningún tipo de amenaza como les fue reportado al C4 en una llamada de emergencia.
Sin embargo, por protocolo, evitaron la entrada a instalaciones aledañas así como su cruce por esas calles hasta que finalmente determinaron como falso el reporte.
Cabe mencionar que ciudadanos de a pie y conductores manifestaron su molestia ya que no previeron de manera oportuna y coordinada el cierre de las calles, lo que provocó un gran caos en este céntrico sector de la capital.
