Los aficionados al rey de los deportes de esta capital, estamos de plano decepcionados con el triste papel que vienen desempeñando los Dorados en el Campeonato Estatal. Empezaron bien pero ya aflojaron, y cómo no va a ser así, al perder la serie última con los Soles de Ojinaga, nos escribe un lector de nombre Ariel Canio.
Aunque parezca increíble, así sucedió, se perdió la serie dos juegos por uno, y al paso que vamos, pues vamos al hoyo. Las entradas no han sido buenas que digamos, y al rato, solamente van a ir los familiares y amigos de los jugadores, porque es decepcionante la forma en que se han comportado.
Urge que se tenga una plática con Fernando Albañil el manejador, antes de que como se dice, la sangre llegue al río, y en un descuido ni califiquen a play offs los Dorados.
Se cuenta a voz en cuello que les están debiendo a los muchachos las últimas dos semanas, y esto es grave, porque sin dinero no hay un estímulo pues para nadie. Entrar a jugar requiere de entusiasmo, y si no hay paga, pues se cae el entusiasmo, es grande el esfuerzo físico y mental que se necesitan para participar, porque la calidad de los equipos sea como sea es grande.
La clase de juego del estado es alta, aquí hay calidad a nivel nacional, entonces se requiere echarle ganas a la mera hora. Esperemos que Orlando Villalobos, el jefe del Instituto del Deporte del Municipio, se junte con el presidente de la segunda zona, el ciudadano Luis Bustamante y a ver qué pasa, quién está fallando, y también que esté Albañil, para que se enderece el barco.
Ojinaga es un equipo que nunca ha ganado un campeonato estatal y casi siempre anda de colero, y viene y zas le suena a Dorados, que es el equipo de que va en segundo lugar de campeonatos ganados en la historia del béisbol de Chihuahua.
A poner todos su parte, los jugadores, el manejador, los entrenadores. Ah y que les paguen a los jugadores, no se vale, las cosas tienen que normalizarse, la afición lo exige, pero ya.