El 20 de agosto de 1986, fue creado el Servicio Postal Mexicano
Hace 33 años, el 20 de agosto, se creó el Servicio Postal Mexicano, dándole el carácter de organismo descentralizado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Esta disposición quedó asentada en la Ley Orgánica de la Administración Pública.
De esta manera, lo que se conoce tradicionalmente como el correo, cuenta con personalidad jurídica y patrimonio propio. Dicho decreto estableció también, que este servicio viene a ser una actividad estratégica reservada en forma exclusiva al Estado, al gobierno, de acuerdo con los artículos 25 y 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Haciendo un poco de historia, habría que recordar que el rey de España, Felipe II, el 31 de mayo de 1579 nombró como Correo Mayor a Martín de Olivares. Le correspondió al virrey Martín Enríquez de Almanza dar posesión de su cargo al designado, el 27 de agosto de 1580. Cabe aclarar, que no obstante el nombramiento extendido por la autoridad española, el servicio de correo lo prestaba una empresa privada.
En julio de 1766, el correo pasó a ser controlado en forma directa por la autoridad virreinal, con una mejoría muy notable del servicio, según consta en las viejas crónicas de la Colonia. Con el paso de los años, de alguna manera esta función ha sido suplantada por el teléfono, la computadora, el celular y demás aparatos que inundan el mercado.
El Servicio Postal Mexicano, entre sus funciones, tiene la de emitir estampillas postales, además del servicio propiamente dicho de prestar el servicio público de correo. La primera estampilla postal apareció el 1 de agosto de 1856, durante el gobierno de Ignacio Comonfort. La misma tenía la efigie de Miguel Hidalgo.
