El 22 de septiembre de 1910, se inauguró la Universidad Nacional de México
Desde 1865 había desaparecido la Real y Pontificia Universidad de México, por órdenes de Maximiliano, quien consideraba que esa casa de estudios requería de una amplia reestructuración. El 22 de septiembre de 1910, abrió sus puertas nuevamente, con el nombre de Universidad Nacional de México.
Durante el virreinato surgiría la Real Universidad de México, por Cédula Real de Carlos V, en 1551. En 1553 empezaron las clases, las que tenían el sello característico de las universidades europeas, con un toque religioso. Años más tarde se denominó a la escuela, Real y Pontificia Universidad de México, por orden del Papa Clemente VIII
En 1881, Justo Sierra en su carácter de diputado lanzó la propuesta para crear la universidad nacional, misma que fue vista con buenos ojos, pero no contó con el apoyo del gobierno. La iniciativa prosperó en 1910, durante el gobierno de Porfirio Díaz, cuando se presentó ante la Cámara de Diputados. Sierra insistió en que debía estar constituida por las escuelas preparatorias, de Jurisprudencia, Medicina, Ingeniería, Bellas Artes y Altos Estudios. El jefe sería el ministro de Instrucción, y se debería contar con un rector, nombrado por el Presidente y el Consejo Universitario.
Después vendría el proceso para obtener la autonomía. Hubo una huelga del 6 de mayo al 10 de junio de 1929, que fructificó con la obtención de la autonomía. Y a partir de entonces la institución se llamó Universidad Nacional Autónoma de México.
