Tercera Parte
En el intento de encontrar una legislación, buenas prácticas o mecanismos que más eficazmente ayuden en el combate a la corrupción e impunidad en nuestra República Mexicana, se logró ubicar en algunos países latinoamericanos, legislaciones y mecanismos de buenas prácticas que han sido muy eficaces en el combate a la corrupción e impunidad en que se han visto envueltas dichas naciones, las cuales, entre otros aspectos, han servido para bajar los altos índices de delitos violentos en su territorio.
En ese contexto, he de mencionar a continuación las experiencias publicadas por los entes internacionales involucrados en el combate de este fenómeno criminal, esperando puedan servir como antecedente y aliciente para que nuestras actuales autoridades de los tres ámbitos de gobierno, tanto federal, estatal y municipal, tomen las medidas que más se ajusten a nuestra realidad social a efecto de que se considere que dichos mecanismos sean replicados en nuestro país con el objetivo de que se erradique, prevenga, investigue o en su defecto se sancionen los actos de corrupción en el ámbito de sus competencias.
Con dicha introducción y en ese tenor, después de realizar las búsquedas correspondientes, encontramos la existencia de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) y la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), auspiciadas la primera de ellas por la Organización de Naciones Unidas (ONU) y la segunda por la Organización de los Estados Americanos (OEA), creadas para apoyar a los gobiernos de la República de Guatemala y de la República de Honduras, respectivamente.
En ese orden de ideas y por su importancia, se tratará de documentar los antecedentes que dieron origen a dichas Misiones Internacionales, así como sus objetivos, trabajos y resultados obtenidos en su funcionamiento, entre otros aspectos de interés. En dicha búsqueda, también se encontraron antecedentes de otros Organismos Internacionales creados en países latinoamericanos con el mismo objetivo, esto es combatir la corrupción e impunidad, como son el caso de la nación de Ecuador y muy recientemente en la República de El Salvador en donde se ha establecido la Comisión Internacional Contra la Impunidad de El Salvador (CICIES), de los cuales con posterioridad trataremos documentarlos para entender sus objetivos y funcionamiento.
Por principio se presentarán los acontecimientos generales que dieron origen a una de las Comisiones Internacionales más importantes y trascendentales en el combate a la corrupción, auspiciada por la Organización de las Naciones Unidas y que en sus más de 70 años de existencia, la ONU no había propiciado, siendo la primera en su tipo; Comisión que del análisis realizado a sus publicaciones, fue creada con el objeto de acabar o al menos combatir la corrupción en una Nación que, asfixiada por la violencia en la mayoría de las ocasiones generada por la impunidad como consecuencia del alto índice de corrupción, pedía a gritos el apoyo internacional para reducir el alto índice de la violencia, fenómeno que estaba permeando la mayoría de las instituciones públicas de dicho país, desafortunadamente, también en aquellas instituciones encargadas de procurar e impartir justicia.
Esta Misión Internacional que combatía la corrupción e impunidad del vecino país, surgió de la presión que distintos actores de la sociedad civil, organismos internacionales, entre otras, hicieron constantemente a las autoridades en turno, pues veían cómo la violencia, en la mayoría de las veces generada por la corrupción sobrepasaba la capacidad gubernativa y se les salía de las manos debido a que no tenían los medios, ni la capacidad para hacerle frente, y que por tal motivo, era necesario que un ente externo fuera a auxiliarlos en dicha tarea colosal, por supuesto, desafortunadamente se daba una situación que no era privativa de dicha Nación.
Sin embargo, según las publicaciones consultadas, esto no fue nada fácil, las discusiones y objeciones no se hicieron esperar e iniciaron en los tres ámbitos de gobierno del Estado; una de las objeciones más sobresalientes que en su momento se manifestaron, era aquella basada en la discusión que indicaba que dicho ente internacional vulneraría la “Soberanía” nacional y que por lo tanto su actuación contravendría la Constitución, por lo cual no era oportuno su creación.
No obstante, después de varias discusiones y consultas, en la resolución de la opinión consultiva realizada al máximo organismo constitucional de dicho país, éste resolvió que la creación de una Comisión Internacional que combatiera la Corrupción e Impunidad en dicha Nación, NO vulneraba la Constitución ni mucho menos socavaba su soberanía. Es así como, a pesar de varios opositores, que por supuesto entre ellos se encontraban aquellos que veían en peligro su status quo de hacer las cosas al margen de la ley, la Comisión Internacional solicitada, fue auspiciada por la Organización de las Naciones Unidas y aceptada por la legislación de la Nación requirente, surgiendo así como un Ente autónomo e independiente, la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, CICIG por sus siglas, la cual tuvo vigencia por más de doce años hasta su cierre ocurrido el 3 de septiembre de 2019.
En las próximas publicaciones se mencionará a groso modo y de acuerdo a los antecedentes publicados por dicho Ente Internacional, el contexto sociopolítico existente que dio origen a su creación, su fundamento jurídico, los primeros pasos importantes que dio esa Comisión Internacional en el combate a la corrupción e impunidad; sus objetivos, las personas que la dirigieron, los casos que se investigaron y los logros que se obtuvieron, entre otras cuestiones de interés que auxiliaran al lector a lograr una mejor comprensión histórica de los acontecimientos y que se han podido recabar, como ya se hizo mención, de las diversas publicaciones emitidas por dicha Comisión Internacional en diferentes medios de comunicación masiva, así como en su portal de internet.
Lo antes señalado con el único fin de visualizar lo importante que es el combate a la corrupción, exhortando a las autoridades mexicanas para que consideren replicar en nuestro país un Organismo semejante, que venga a fortalecer nuestras instituciones en el combate a la corrupción para con ello bajar los altos índices de violencia que en la mayoría de las veces es ocasionado por la impunidad que precisamente genera esos actos de corrupción.
“Fiat Justitiae, Pereat Mundus”.