EL ORÁCULO DE APOLO

 

¿Cómo se calcula la fecha de la Pascua?

Por Enrique Pallares

 

Es muy común entre la gente que año con año se pregunte en qué mes, marzo o abril, y en qué días caerá la Semana Santa; ya sea para planificar sus vacaciones o para resguardarse en profundas meditaciones. La Pascua de Resurrección se ha celebrado como un importante ritual religioso cristiano a partir del 325, año en que se celebró el Concilio de Nicea, antigua ciudad de Bitinia, en Asia Menor, bajo los auspicios del emperador romano Constantino.

A esta asamblea se convocó principalmente para resolver la disputa sobre el arrianismo, el espinoso problema de la Trinidad, la controversia de la pascua y otras cuestiones religiosas que provocaban divisiones entre las primitivas comunidades cristianas. Estas disputas ya habían sido la causa de que se derramara mucha sangre, y constituyó un capítulo oscuro en la historia.

La primera parte de la controversia versaba sobre la legalidad de celebrar la Pascua en un día laborable. Las diócesis de toda Asia, basadas en una antigua tradición, sostenían que la fiesta Pascual se debía celebrar el décimo cuarto día de la luna, en cuyo día se le ordenó a los judíos sacrificar un cordero y defendiendo la idea de que el ayuno debía terminar ese día, sin importar en qué día de la semana cayera. Así pues, el asunto a discutir trataba principalmente si la Pascua se debía celebrar en domingo.

Por otro lado, dado que el festival de Pascua se tenía que celebrar siempre en domingo, y no debería coincidir con ninguna fase particular de la luna, (que era de tradición judía), podía ocurrir en cualquier día de la semana, y de ahí surgió una nueva disputa sobre la determinación del domingo mismo.

Un tercer problema incluido en esta controversia pascual se debió principalmente a los ciclos divergentes que Roma había adoptado y rechazado muchas ocasiones en su intento por determinar más exactamente la fecha de la Pascua, pues en muchos lugares, todavía se adherían a un sistema antiguo de computar esta fecha, el cual Roma misma había dejado a un lado

Así pues, dado que la historia es larga, lo cierto es que nos percatamos cada vez, que se trata de una semana de conmemoración movible anualmente, pues no se lleva a cabo siempre los mismos días. Pero ¿por qué varía la fecha de la Pascua? ¿Qué es lo que hace que unos años sea en algunos días de marzo y otras en los de abril? La respuesta no es del toda clara para los más jóvenes -ya que los de mayor edad seguramente la deben conocer-. De cualquier manera mencionaremos, para empezar, que la principal razón por la que se mueve esta fecha en el calendario depende de las fases de la Luna y de una decisión tomada hace ya varios siglos, precisamente en el Concilio de Nicea.

La palabra “pascua” proviene de la palabra hebrea “pésaj” que significa “paso”.

Desde varios milenios antes de nuestra era, en las culturas que se desarrollaron en el mediterráneo, se hacía una fiesta de varios días, en la primera luna llena de la primavera por el paso, precisamente del invierno a la primavera. La Pascua judía se relaciona con el “paso” del Mar Rojo según el relato que se encuentra en La Torá judía; más conocido en la cristiandad como el Antiguo Testamento. Desde luego que los primeros cristianos -que eran judíos- celebraban la pascua de la Resurrección cronológicamente igual que la Pascua judía.

Por mucho tiempo los métodos de calcular la fecha de la Pascua habían formado parte de la ciencia escolar, y proporcionó los primeros ejercicios de cálculo de la ciencia medieval temprana, allá por el siglo ll. El problema principal relacionado con el calendario cristiano surgió del hecho de que era una combinación del calendario romano Juliano, basado en el movimiento anual de la Tierra, relativo al Sol, y el calendario hebreo, basado en las fases mensuales de la Luna.

Ya desde el siglo ll, las fechas diferentes de la Pascua, que resultaban de utilizar métodos de cálculo distintos, provocaron, como ya dijimos, controversias y feroces discusiones, convirtiéndose, junto con otros, en problemas crónicos.

Para terminar con estos conflictos, fue que el emperador Constantino convocó al Concilio ya mencionado, donde se decidió que la Pascua se celebrara, en lo futuro, el primer domingo después de la luna llena posterior al equinoccio de primavera (que caerá siempre entre el 22 de marzo y el 25 de abril). Es por eso que siempre vemos en esa semana luna llena. Hoy día la iglesia católica mantiene el carácter móvil de la fecha igual que la Pascua Judía.

Actualmente existen métodos matemáticos que nos permiten calcular el movimiento de la luna, sus fases y las estaciones del año, que pueden ser aplicados para dicho cálculo. Muchos eruditos modernos siguen discutiendo acerca de no sólo de la fecha, sino porqué coinciden la Pascua Judía y la Pasión y Resurrección de Jesús.

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