El Arte en la Penal
Por Violeta Rivera Ayala
Buen día, ya es domingo de viaje en carretera y hoy platicaremos de un tema sensible que como sociedad suele dejarse al margen, restándole importancia: Las mujeres en la Penal.
A diferencia de los hombres presos, quienes la mayoría siguen recibiendo visitas durante toda su estadía, un porcentaje bastante alto de las chicas son abandonadas, rechazadas y estigmatizadas por sus propias familias. La comprensión que se le da al sector masculino es muy lejana en comparación con lo que le sucede a las féminas, quienes aunado lo vulnerable de su condición, siguen encargándose de ser el sostén económico de esos hogares que dejaron fuera.
No se trata de pelear ni de un debate de género, creo ante ese tema que en el fondo, quizás, sólo estamos buscando todos lo mismo: complementarnos, integrarnos y equilibrar la energía que cada uno aporta. Además, particularmente en estos casos, supongo que nadie quisiera estar en uno u otro bando. Sólo lo menciono como punto de partida para compartirles por qué me interesó involucrarme con esta causa. Están solas, cada historia es más drástica que la que sigue, sin embargo, lo importante es evitar estancarnos en su situación de víctimas, pues ésta paraliza y el mundo y nuestra alma nos necesita en acción, para revertir esta realidad y acceder a tener una mejor existencia.
Me queda claro que son fuertes y valientes. También que siempre se puede estar mejor o peor. ¿Qué lado de la moneda preferimos? La respuesta es casi obvia, aunque ignoremos cómo lograrlo y digo casi, porque también habrá quienes prefieran sólo flotar o regodearse de su condición y sentarse a esperar que otros le acerquen el pez a la boca, algunos además, emitiendo juicios y crítica desde su silla. Dice la canción de Bersuit Vergarabat: “No hay fracaso más rotundo que haberse venido al mundo, pa´morirse y nada más”.
Como seres humanos pendulamos entre la armonía y la desarmonía y a veces la balanza se nos sale de control. Y entonces, unos sufren ataques de ansiedad, mientras otros reaccionan con ataques de ira. Unos enferman de cáncer, mientras otros enfrentan a ese cáncer personificado quizás en aquel personaje de quien esperaban amor y cuidado y sólo recibieron violencia, indiferencia, humillación. El coraje, el odio, la tristeza, el dolor y todos aquellos sentimientos e ideas de baja frecuencia, nos llevan a unos a padecer una enfermedad y a otros a gritar y descargar la furia por medio de las herramientas que tenemos disponibles según nuestra capacidad de discernimiento, conciencia y reacción. Obviamente llegar a esto para nadie es deseable. No obstante, si en el presente nos detenemos y miramos hacia atrás, sabremos que simplemente no podíamos haber actuado de otra manera.
Tal vez hasta que tocamos fondo es que se enciende la fuerza para despertar, exigir, luchar, aprender, amarnos, brillar, perdonar. Así sea un fósforo, una luz al final del túnel, una esperanza, pues para abajo ya no hay más piso que la muerte y si estamos vivos y vivos nos queremos, por algo debe ser.
Tuve la oportunidad de asistir a la Penal de Puente Grande Jalisco, junto con un maravilloso equipo de entusiastas y líderes que tienen fe en las reclusas y un corazón noble que las lleva a encontrar las maneras de contribuir a mejorar las condiciones y calidad de vida de las internas, tanto a nivel emocional e intelectual, como productivo. Karla y Ana Bueno, fundadoras de varias iniciativas de vinculación con el sector empresarial, se han enfocado en los últimos meses en ofrecerles fuentes de empleo a través de oficios que potencialicen sus capacidades creativas y de auto-sustentabilidad.
Durante la visita, se presentó a la influencer y coach Martha Ro, quien entregó un donativo que logró reunir al convocar a una subasta desde sus redes sociales, con lo que mejorarán sus instalaciones, por ejemplo, comprarán aires acondicionados y adquirirán máquinas de coser para que reciban capacitación y guía por parte de Luz Ybararrán, quien también estuvo presente, diseñadora de trajes de baño con marca homónima. Otros trabajos que ya operan para abonar a su solvencia monetaria son bordados para vestidos de novia y gala, elaboración de bolsas tejidas a mano, uniformes, costalitos relajantes de aromaterapia, bisutería y venta de comida.
Durante el evento de entrega del gran cheque, Martha impartió una charla motivacional de alto impacto a 200 convictas, que culminó con una meditación en la que conectaron con su niña interior, quien de alguna manera les brindó un mensaje. Algunas compartieron la experiencia externando que se sintieron abrazadas, plenas y llenas de amor. Ro aclaró que eso no es positivismo ciego, que su vida no cambiaría de la noche a la mañana, pero sí que tenemos la chance de mirar con otros ojos el mundo, cada una acompañada de su pequeña interior, quien siempre estará ahí para darles fuerza. Paso a paso es como se va avanzando.
Luego, con el respaldo y coordinación de Ana, Karla, Luz y Martha, así como de las autoridades presentes, y convencida de que el Arte es una poderosa herramienta de sanación, expresión y libertad, cerramos el acto convocando a quienes quisieran pintar murales donde se plasme esta transformación que vivieron, a fin de dar continuidad a la experiencia vivida esa tarde. Ignorábamos cuántas pudieran acercarse, aunque confiábamos en que de ser 3 o 4 ya podríamos comenzar con algo digno y representativo.
Nuestra sorpresa fue que alrededor de 50 internas se anotaron con gran interés en participar, aportando ideas que serán concentradas en paredes y muros con una dimensión total aproximada de 60 mts2. El título será “Yo conmigo, de niña”.
Se estima un tiempo aproximado de diez días para la pinta de los murales. Es menester mencionar que yo no cobraré honorarios, será un servicio altruista para que ellas gocen de un lugar más alegre, colorido y significativo, que les recuerde que el poder y la magina transformadora está en su interior, así como que existe la libertad mental, pues cuántas veces vivimos presos de miedos, angustias, de una cruz o de ataduras limitantes, sin tener que estar encerrados en un espacio físico.
Ya antes han llevado clases de historia del arte y pintura, de hecho montaron una exposición que se fue a Los Ángeles, misma que recordaban con gran orgullo. No es el primer acercamiento en este quehacer al que acceden como internas, sin embargo, sí se pretende que aquello que antes otras comenzaron, hoy siga su vuelo y tenga una continuidad remunerable a corto plazo.
Es por ello que ante la respuesta y sobre todo el entusiasmo mostrado, la segunda meta es dirigir otras opciones de capacitación en la plástica, encaminadas mejorar su liquidez financiera y a formar escuela con aquellas que decidan seguir, bajo la firma “VIOCOLOR by Mujeres de la Penal”, lo que asegurará calidad, supervisión, capacitación, compromiso, un estilo identificable y pagos justos, al tiempo que disfruten y desarrollen sus talentos con esta rama artística, pintando por ejemplo objetos personalizados o cuadros decorativos.
Para que podamos comenzar lo antes posible con los murales al interior del Centro de Readaptación Social, requerimos patrocinios en especie o efectivo: pinturas, brochas, charolas, pinceles. Asimismo, para las siguientes actividades, necesitamos objetos por lotes de cincuenta piezas para que los pinten y la contratación de sus servicios.
Merecer y vivir dignamente, tener segundas oportunidades, es para todos y esto sin duda es una bella causa. Dejo datos bancarios y de antemano agradezco su solidaridad. En todo momento tendremos transparencia en el uso de los recursos. Estamos listas para empezar a pintar, la invitación es a que sean parte del proyecto y nos den la palmadita de buena suerte que requerimos para lograrlo. Que así sea. Gracias.
Violeta Rivera Ayala
HSBC
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