“La única educación eterna es esta: estar lo bastante seguro de una cosa para decírsela a un niño” (G.K. Chesterton)
Por FerMan
¿Qué pasa con los ministros de la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de nuestro país? Es la pregunta que la gran mayoría de los mexicanos nos hicimos el pasado miércoles 4 del presente mes y año, cuando la SCJN, en menos de quince minutos, sin entrar al fondo del asunto, desecharon la Controversia Constitucional promovida por el Ejecutivo de nuestro Estado de Chihuahua en contra de la distribución de los libros de texto gratuitos que la SEP pretendía distribuir en las escuelas públicas de preescolar, primaria y secundaria.
Dicha resolución, elaborada por el ministro Arturo Záldivar, y votada por unanimidad por los ministros de la primera sala de la SCJN, dejó sin efectos la suspensión que fue otorgada por el ministro Luis María Aguilar Morales en favor de la niñez chihuahuense, suspensión derivada de la mencionada Controversia Constitucional que la gobernadora María Eugenia Campos Galván interpuso por haberse violentado, entre otros, el marco jurídico que regula los programas y planes de elaboración y distribución de los libros de texto gratuitos.
También, esta resolución tan lamentable, sin duda alguna, deviene de las presiones políticas y económicas que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y todos sus secuaces, han estado realizando en contra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pues no se puede ocultar que, el ministro Arturo Zaldívar, firme aliado del actual Gobierno federal, supo congratularse con quien, cuando estuvo de presidente de la Suprema Corte, lo apoyó para su reelección, lo cual por supuesto, y a Dios gracias, no sucedió.
A los ministros que integran la primera sala de la SCJN, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Ana Margarita Ríos Farjat, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y Juan Luis González Alcántara y Carrancá, se les olvidó que, su principal obligación es proteger los derechos de la niñez mexicana, sin importar las consecuencias que de ello se deriven, pero que con su resolución a todas luces incorrecta, nada les importó la defensa de los derechos humanos de los niños y adolescentes de chihuahua, sino además pasaron por alto las ilegalidades en que incurrieron los funcionarios de la administración de AMLO al elaborar y distribuir los nuevos libros de texto gratuitos, pues es bien sabido que, se violentó el marco jurídico que regula los programas y planes educativos que la SEP está obligada constitucionalmente a respetar, lo cual no aconteció.
Es por lo que no se entiende cómo estos ministros de cuarta, o más bien, favorecedores de la perversa cuarta transformación, nada les importó los argumentos vertidos por el ministro Luis María Aguilar Morales para otorgar la suspensión por haber encontrado, al menos de manera provisional, vulneración a los derechos fundamentales de la niñez chihuahuense contenidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Qué pena para el Estado Mexicano que uno de los poderes más importantes esté siendo manipulado y sometido al Ejecutivo Federal. No omitimos señalar que, los nuevos libros de texto gratuitos, que la SEP elaboró y distribuyó para este ciclo escolar 2023-2024, no sólo se elaboraron violentando el marco jurídico de los programas y planes educativos que constitucionalmente está obligada a respetar, sino que, además los contenidos de estos, tienen errores en fechas importantes, así como información anticientífica, con la intención de ser utilizada para adoctrinar e hipersexualizar a la niñez mexicana.
Es por lo antes señalado que, la traición en la que incurrieron los ministros de la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación quedará grabada en la historia de México y que, junto con los perversos funcionarios del gobierno de López Obrador, serán juzgados por haber permitido que la niñez mexicana fuera corrompida. Por cierto, este lunes se informó de otro amparo a favor de un padre de familia, para suspender nuevamente y de forma provisional la entrega de los libros de texto gratuitos, mientras se analiza el caso. Estaremos muy pendientes.
“Fiat Justitiae, Pereat Mundus”.