El derecho que se tiene a decir “no quiero”
Por CARLA CABELLO
La Comisión de Igualdad y Género de la Cámara de Diputados a nivel Federal, puso en la mesa para su discusión, el tan polémico tema de la despenalización del aborto, esto como parte de la agenda legislativa que Morena tiene y se había tardado en abordar.
Como era de esperarse, la posible interrupción del embarazo de manera legal generó reacciones a favor y en contra, lo cierto es que la Suprema Corte de Justicia de la Nación ya se ha pronunciado en múltiples ocasiones por el derecho que tiene la mujer a decidir.
Desde mi punto de vista, creo que ha llegado el momento de asistir hoy a la despenalización total y de sacar el aborto del Código Penal, como lo están haciendo varios países.
Creo también que el Estado debe garantizar de manera absoluta el acompañamiento cuando las mujeres aceptan el embarazo, pero también cuando deciden interrumpirlo.
Me parece que el argumento que tiene la Corte va en la lógica de un país que pretende entrar a la globalidad y ser progresivo cuando se trata de proteger los derechos humanos de las personas, en este caso, el derecho a decidir.
Por lo anterior, enumeraré algunas de las razones por las que creo que no es correcto criminalizar a la mujer.
1. Afecta, restringe y viola derechos humanos de niñas, adolescentes y mujeres.
2. Las induce a recurrir a métodos de aborto inseguros para su vida y su salud.
3. Aumenta las muertes y la pérdida de salud de mujeres.
4. Incrementa la posibilidad de abortar ilegalmente.
5. Las expone a ser víctimas de tortura, tratos crueles, inhumanos y violencia institucional.
6. Incrementa los mercados clandestinos y millonarios.
7. La penalización del aborto va en contra de la sociedad igualitaria.
El Estado mexicano debe garantizar y hacer justiciable la interrupción legal del embarazo conforme a los protocolos internacionales, estableciendo un ejercicio de derecho comparado respecto de las formas y especificaciones que tienen otros países en sus legislaciones en la materia.
Por último, me pronuncio a favor del libre desarrollo de la personalidad.
Que mi expresión te haga pensar.