López Obrador: el presidente candidato
Por Armando Ruíz Acosta
A tres años de una elección histórica, donde una izquierda facciosa y engañosa, ganara la Presidencia de la República, liderada por Andrés Manuel López Obrador, bajo la coalición “Juntos Haremos Historia” de los partidos MORENA-PES-PT, el hoy presidente sigue en constante campaña.
Luego de sus dos intentos fallidos a “la silla grande”: El primero en el año 2006 al contender como candidato presidencial bajo las siglas del PRD y autoproclamarse ridículamente “presidente legítimo”, asegurando unas elecciones fraudulentas; y el segundo en 2012 donde nuevamente, ante la derrota, se vio obligado a denunciar fraude en su contra.
Tal como el «candidato perpetuo» Nicolás Zúñiga y Miranda, que bajo una obsesión por ganar contendió 9 veces por la presidencia de México, quien se autodenominaba “el candidato del pueblo” y/o “el candidato de la gente” pero la gente ya lo tildaba de loco ¿nos resulta familiar?
Fue hasta el tercer intento, como coloquialmente se dice “la tercera es la vencida”, cuando Andrés Manuel López Obrador tras una intensa campaña representando a la coalición “Juntos Haremos Historia” se vio ungido por una aplastante victoria, dejando en el camino a los “gallos” del PRI y el PAN, a quienes no les quedó más que salir a reconocer muy temprano la derrota.
El problema radica en que para unos terminó la campaña, pero curiosamente para él, que resultó victorioso, NO.
Desde hace tres años, las conferencias de prensa de Andrés Manuel López Obrador también conocidas como “las mañaneras” han sido la forma de gobernar del hoy presidente, pero no para informar. Desde su tribuna genera polémica, envía mensajes, comanda ataques, polariza y divide.
Señala diariamente a sus “adversarios” acusándolos de conservadores, sin tomar en cuenta que él es un populista muy conservador. Llenando de autoelogios a la llamada Cuarta Transformación, resulta más que evidente que el presidente utiliza esta forma de comunicar, como instrumento de propaganda personal.
Es un presidente en campaña permanente, ególatra, aferrado, necio, sabelotodo y todólogo, cegado ante sus “megaproyectos” y sus “otros datos”, resulta necesario analizar: primero, su falta de resultados al gobierno; segundo, de una manera detallada el texto de Enrique Krauze “el pueblo, soy yo”.
El día de hoy 1º de diciembre, ignorando el repunte del SARS COVID-19 y sus nuevas variantes, pandemia que su gobierno en constantes ocasiones ha presumido “domar” sin que los ciudadanos veamos resultados reales, el hoy presidente, invita al informe del tercer año gobierno que dará desde el Zócalo capitalino e hizo una invitación a todos aquellos que quieran asistir, a pesar de la pandemia.
Siguiendo la dinámica de comunicación social de ser un eterno candidato, nuevamente, tal como lo hizo con El Informe por los primeros 100 días de gobierno; La conmemoración del primer año de la victoria en las elecciones de 2018 “Juntos Hicimos Historia”; El informe con motivo del tercer año de la victoria histórica democrática del pueblo de México; e intenta hacerlo con la consulta sobre la Revocación de Mandato.
Lo que termina quedando muy claro es que los ciudadanos necesitamos un presidente, candidatos ya hemos tenido muchos, pero, lo que hemos visto en Andrés Manuel en estos tres años como presidente no es más que la continuación de su eterna campaña, siendo un eterno candidato y no el presidente que la gente creyó que sería. Esperemos que en sus tres años restantes logre dejar de lado su interés personal y dar resultados.